SANTANA IV Y UN SONIDO QUE VUELVE A LAS FUENTES
El músico mexicano reunió a su antigua banda de los setenta y este encuentro del quinteto luego de 45 años provoca un gran álbum con la energía de aquel sonido que fue un hito en el rock mundial.
En "Santana IV" el guitarrista se reúne con los músicos que participaron en los primeros tres álbumes de su banda para recordar que antes de que su nombre estuviera ligado a su exitosa carrera solista.
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El regreso del guitarrista Neil Schon y el tecladista Gregg Rolie, quienes dejaron la agrupación en 1973 para conformar Journey, junto con el baterista Mike Shrieve y el conguero Mike Carabello le da a la banda Santana una dinámica natural y al álbum un flujo familiar, tal vez un poco pasado de extensión.
Grabado a lo largo de dos años, "Santana IV" es notable por los duelos de guitarra entre Santana y Schon, la vibra de Peter Green en "Shake It", el ritmo de Phil Lynott-Gary Moore en la apasionada "Blues Magic" y los solos con el sello del grupo en "Echizo", una pieza ardiente que termina demasiado pronto y que merece una versión extendida.
Adaptaciones de los éxitos de la banda "Oye como va" (que aparece en el álbum como "Anywhere You Want To Go") y "Evil Ways" (ahora llamada "Leave Me Alone"), dos piezas con el vocalista invitado Ronald Isley y muchos ritmos latinos son otros de los encantos del álbum.
El disco ya está disponible en Argentina y fue presentado en Estados Unidos el pasado 15 de abril y buscan repetir el gran éxito mundial de 1971 con "Santana III" que llegó a ser multi-platino,.
El origen de esta reunión se remonta varios años atrás, cuando Schon sugirió a Carlos Santana que ambos deberían grabar algo juntos. A Santana le agradó la idea, pero tuvo una incluso mejor, proponiendo que reclutaran a Rolie, Shrieve y Carabello para el proyecto que sería titulado Santana IV.
Después de las primeras sesiones de composición y ensayos, que tomaron lugar en 2013, el grupo grabó entre 2014 y 2015, logrando dar forma a 16 asombrosas pistas que combinan sus elementos característicos: ritmos afro-latinos, voces ascendientes, solos de guitarra electrificantes con estilo blues-psicodélico.
“Fue mágico”, contó Santana. “No tuvimos que intentar forzar la vibra, fue inmenso. A partir de ahí, necesitábamos encontrar un balance de canciones e improvisaciones que la gente identificara inmediatamente como Santana”.